
EL CLUB DE LOS MADRUGADORES_
Sin darme cuenta empecé a hacerlo. No digo que sea fácil, el cambio de alimentación ayuda.
Tampoco hay que ser fundamentalista tibetano. La clave es intentar hacerlo antes del amanecer, porque esa energía es inexplicablemente poderosa y restaurativa.
Ahora encontré el libro que explica un poco todo esto a lo que llegué de pedo.
Del gran Robin Sharma.
(Si te interesa me lo pedís y te lo paso en digital)